Metamorfosis

NARCISO Y ECO

Eco era una joven ninfa de los bosques, parlanchina y alegre. Con su charla incesante entretenía a Hera, esposa de Zeus, y estos eran los momentos en los que el padre de los dioses aprovechaba para mantener sus relaciones extraconyugales. Hera, cuando se enteró de esto, castigó a Eco a no poder hablar, sólo podía repetir el final de la frase que escuchase. Ella dejó de ir a los bosques que frecuentaba, recluyéndose en una cueva cercana a un riachuelo. Por otra parte, Narciso era un chico precioso, hijo de la ninfa Liríope. Narciso creció sin saber que era muy hermoso. Eco estaba por Narciso e intentó hablar con él, pero no le salían las palabras. Eco se fue a su cueva; estaba tan quieta que se convirtió en parte de la propia piedra de la cueva. Némesis, diosa griega que había presenciado la desesperación de Eco, entró en la vida de Narciso e hizo que se mirase en el agua. Desde entonces el joven estuvo ocupado eternamente mirándose. Se enamoró de sí mismo, tanto que se lanzó al agua para reunirse con su propia imagen, y murió ahogado. En su memoria dieron su nombre a una flor que crece sobre el agua.

(Ana Cuadrado)

LEDA Y EL CISNE

Leda era hija de Testio y esposa de Tindáreo de Esparta. Ella fue seducida por Zeus cuando caminaba junto al río Eurotas. Zeus, transformado en un cisne, fingió ser perseguido por un águila. Ella se aproximó y el dios la violó. Esa noche se acostó también con Tindáreo y se quedó embarazada de cuatro hijos. Helena de Troya y Pólux, hijos del dios, y Clitemnestra y Cástor, hijos de su esposo.
Pero se dice que Cástor y Pólux eran ‘gemelos’ y se les conoce como los Dióscuros.
Leda es finalmente convertida en dios por Némesis, la diosa del castigo justo.

(Steven Cabezas)


NÉMESIS

Cuenta este mito que cuando Zeus se enamoró de Némesis (hija de Nicte, la Noche, y de Océano), ésta, huyendo de él, se arrojó al agua y se convirtió en pez; el dios la persiguió transformado en castor. Entonces ella saltó a tierra y se metamorfoseó en diversas fieras, pero no pudo escaparse de Zeus, porque éste tomaba la forma de animales más feroces y rápidos que ella. Por fin, Némesis remontó el vuelo con forma de ganso y Zeus la siguió mutándose en un bello cisne, forma con la que la cubrió sobre los cielos de Ática. Según algunas versiones, tras esta unión, Némesis pondría un huevo del que nacería Helena de Troya.

(Marta Hernández)

APOLO Y DAFNE

Apolo, dios del Sol y de la música, era un gran cazador y quería matar a una pitón que había en el monte Parnaso. Al llegar allí mató a la serpiente con sus flechas. Los dioses, al enterarse de esto, se disgustaron mucho, puesto que Delfos era un lugar sagrado y no querían que se cometiera allí ningún asesinato. Entonces los dioses decidieron vengarse de Apolo, pero este reclamó Delfos para sí mismo y consiguió quedarse con el oráculo. Allí realizó varios juegos que se celebraban en un anfiteatro.

En otra ocasión, Apolo se burló del dios Eros por llevar arcos y flechas siendo tan niño. Eros se vengó de Apolo y le disparó una flecha de oro para que se enamorase profundamente de Dafne, una ninfa cazadora que estaba destinada a estar con Artemis y, por lo tanto, no podía ni quería estar con nadie más. Apolo fue detrás de Dafne y ella se alejó todo lo que pudo, pero él fue acercándose cada vez más y cuando ya se disponía a cogerla, Dafne, muy cansada, pidió ayuda a su padre el río Peneo de Tesalia, quién la convirtió en un laurel.

(Rocío García)

CEIX Y ALCÍONE

Ceix, rey de Tesalia, era uno de los hijos de Eósforo (dios de las primeras luces del día ) y Alcíone, una de las hijas de Eolo (dios del viento).
Eran tan dichosos que despertaron la envidia de los mismísimos dioses.
Un día, Ceix marchó a consultar un oráculo y Zeus lanzó un rayo que hundió su embarcación y lo mató. Alcíone lo descubrió por un sueño enviado por Morfeo y se arrojó al mar para unirse con su esposo. Los dioses se apiadaron y los metamorfosearon en unas aves marinas de triste canto: los alciones o martines pescadores. Los días en que los vientos se calman, tras el solsticio de invierno, y estas aves incuban sus huevos son conocidos como “días del alción”.

(Cristina Díaz de Mera)

VENUS Y ADONIS

Mirra dio a luz a Adonis. Afrodita pasa por el árbol de mirra y, al ver al bebé sintió lástima de él. Lo puso en una caja y lo llevó al Hades para que Perséfone se encargase de él. Adonis creció allí hasta ser un hombre increíblemente hermoso.
Afrodita volvió a por él, pero Perséfone se negaba a perderlo. Las diosas entraron en una disputa que obligó a Zeus a intervenir. Quedaron en que Adonis pasaría un tercio del año con Afrodita, otro tercio con Perséfone y el otro tercio con quien deseara.
Adonis escogió a Afrodita y empezaron a vivir juntos. El muchacho era un excelente cazador y Afrodita iba con él, aunque esa actividad no le gustaba demasiado.
Un día, la diosa debe atender sus obligaciones y se ausenta durante un corto tiempo, dándole a su amante un prudente consejo: no atacar a un animal que no demuestre miedo. El joven le hace caso, pero al fin olvida la recomendación, lucha contra un enorme jabalí y muere. Afrodita corre en su ayuda pero no puede hacer ya nada. Adonis aparece cubierto de anémonas.

(Ébelin Martín Camacho)

ACIS Y GALATEA

La nereida Galatea y Acis, pastor siciliano hijo de una ninfa y del dios Pan, estaban profundamente enamorados. Pero el cíclope gigante Polifemo también estaba colado por Galatea y un día que la vio abrazada al muchacho, por envidia, arrancó una roca enorme y se la tiró. Acis no pudo evitar el golpe y murió. Galatea convirtió a su amado en el río siciliano del mismo nombre.

Finalmente, dicen algunas versiones, Galatea terminó unida a Polifemo y dando a luz a Gálata, Celto e Ilirio, origen de los gálatas (galos que emigraron a tierras hoy turcas), los celtas y los ilirios (centroeuropeos y balcánicos).

(Claudia Fernández)

NARCISO Y ECO

Narciso era el hijo del río Cefiso y la ninfa Liriope. Cuando nació el vidente Tiresias dijo que viviría muchos años si no veía su rostro nunca.
Cuando cumplió dieciséis años muchas mujeres y hombres iban detrás de él y las rechazaba por su ignorancia.
Un dia de verano, Narciso fue descubierto por Eco, castigada por Hera (por haberla distraído con su palabrería mientras Zeus la engañaba) a enmudecer y repetir tan solo las últimas palabras de sus interlocutores. El joven también la rechazó y ella se consumió hasta hacerse un hilo de voz que repite palabras entre las piedras.

A continuación, Narciso  vio su rostro reflejado en una fuente y se enamoró de su propia imagen, hasta tal punto que no podía comer ni dormir por el sufrimiento de no poder conseguirse a sí mismo.
Muere mirándose en el estanque y su cuerpo se transforma en una flor de centro rojizo y pétalos blancos: el narciso.

Natalia Ávila Pérez 3ºA


CALISTO

Calisto era una chica que iba con la diosa Artemisa (diosa de la caza) y sus compañeras por los bosques.
Zeus se enamoró de ella nada más verla y como sabía que ella no se iba a ir con él fácilmente, se convirtió en Artemisa (otras versiones cuentan que en Apolo, el hermano de Artemisa) para poder estar cerca de ella.

Después de eso, Calisto comprendió que estaba embarazada de Zeus. Y cuando Artemisa se dio cuenta de ello, un día cuando se bañaban en una fuente, muy indignada, la expulsó del grupo, convirtiéndola en una osa (otras versiones cuentan que fue Hera, la mujer de Zeus) a la que dio caza con una de sus flechas.

Esperanza Arranz 3º A